Nuestros inicios
- Publicado por Creyendo en la infancia
- Categoría varios
- Fecha 6 noviembre, 2019
Desde que nos conocimos sabíamos que estábamos predestinadas para algo emocionante. Comenzamos a trabajar mano a mano, conocimos muchas compañeras que nos ayudaron a crecer y seguimos formándonos porque nuestro corazón sabía que lo que les estábamos dando a los niños no era lo mejor, que algo tenía que cambiar, que hacer fichas con niños de 1 y 2 años no tenía ningún sentido, los niños realmente no aprendían, sólo repetían conceptos como papagayos.
Por eso pasito a pasito fuimos creciendo, transformándonos, primero introdujimos la psicomotricidad vivenciada donde Paz después de formarse con la psicomotricista Carmen Torres nos mostró otro modo muy diferente de ayudar a los niños a descubrir el mundo con su cuerpo, en movimiento, controlándolo y sobretodo disfrutando y pasándoselo bien… porque una de las cosas que descubrimos es que el niño aprende cuando se divierte y cuando le interesa lo que hace.
El siguiente paso fue descubrir la metodología Montessori, al principio estábamos cargadas de prejuicios pero en cuanto empezamos a investigar… nos enamoramos. No es solo una metodología, es una verdadera filosofía de vida que nos llevó a poco a poco irnos transformando ya que el cambio en la educación no viene del niño sino de la transformación del adulto y su visión
hacia este.
Por último descubrimos otras metodologías que nos parecían muy interesantes para completar esta maravilla que habíamos iniciado, las provocaciones o instalaciones donde veíamos cómo los niños tomaban decisiones y disfrutaban experimentando, metiendo, apilando…, pero sobretodo siendo ellos los verdaderos protagonistas de su aprendizaje.
Otra conquista fue la pedagogía Warldorf con sus materiales coloridos, naturales que dejan paso a la creatividad del niño, a conocer los mini mundos, a poner emociones a los niños…
Ahora sentimos la necesidad de llevar esta semilla, que hemos tardado años en germinar a otros coles o escuela infantiles, para que otros niños puedan beneficiarse, aprender disfrutando y el adulto aprenda a creer en ellos y guiarles en su camino.
